Coches y redes sociales, los líderes de la automoción en el escaparate global

Elon Musk causa un terremoto cada vez que publica en Twitter, pero los demás líderes del sector también usan las redes para su propio beneficio.

Las redes sociales son un escaparate al mundo y las marcas de coches están presentes en ellas para anunciar sus productos, innovaciones y avances. Un canal que se ha vuelto realmente aburrido porque solo publican lo bueno, lo que les interesa. Por suerte para nosotros, no solo los fabricantes tienen perfiles oficiales en las redes, sino que sus dirigentes, presidentes, consejeros delegados y otros directivos, también las usan, y no siempre mirando en el beneficio de sus compañías.

El ejemplo más claro es Elon Musk, consejero delegado de Tesla. Y lo es, entre otras razones, porque ya no es presidente de la marca por culpa de su comportamiento en Twitter, la red social que, además, acaba de comprar. Aunque hay otras personalidades importantes del sector en Twitter y, sobre todo, LinkedIn, como Herbert Diess, consejero delegado del Grupo Volkswagen, Jim Farley, presidente de Ford, Mary Barra, CEO de General Motors, Wayne Griffiths, CEO de Seat y Cupra, o Luca de Meo, presidente del Grupo Renault, ninguno puede comparar su uso al de Elon Musk.

Elon Musk, acción y polémica

La actividad de Elon Musk en Twitter puede resumirse en tres grandes ejes. El primero es la generación de conversación y controversia. Habla de cualquier cosa que se le pase por la cabeza y suele responder al azar a mensajes que le dejan sus 88 millones de seguidores. Es, además, tan capaz de alabar al Grupo Volkswagen y Herbert Diess por su electrificación, como de llamar “Hitler” a Justin Trudeau, presidente canadiense, por sus acciones en una huelga de antivacunas, "títere" al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, o “pedófilo” a una de las personas que salvó a los 12 niños tailandeses atrapados en una cueva en 2018.

Elon Musk eliminó este tuit poco después de publicarlo.
Elon Musk eliminó este tuit poco después de publicarlo.
En este apartado también se enmarcaría su rivalidad con Ford, que ha dejado frases para el recuerdo como “ Ford ha intentado matar al sexo” de Elon Musk cuando la marca del óvalo amenazó con demandarle a él y a Tesla si usaban el nombre Model E -registrado por Ford- para su berlina para formar su gama “SEXY”, o el ‘zasca’ de Steven Armstrong, CEO de Ford Europa en 2018, cuando Musk celebró haber producido 7.000 coches en una semana. “ 7.000 coches en menos de cuatro horas, equipo Ford”, dijo el directivo.

https://twitter.com/StevenArmstrong/status/1013522801834254337?s=20&t=9DHu3DlIBgDQ1-7J5oeQMg
El segundo eje es el de generar terremotos bursátiles a golpe de tuit. Musk ha disparado el Dogecoin y el Bitcoin, hundido este último, y afectado continuamente a las acciones de Tesla vendiendo acciones tras preguntar a sus seguidores si debía hacerlo.

Su influencia sobre los mercados no tiene comparación y los inversores enloquecen cada vez que escribe en las redes. No debemos olvidar el ya mítico “estoy pensando en privatizar Tesla”, que le costó el cargo de presidente de la compañía y la obligación de que alguien revise sus tuits sobre la empresa. Es a raíz de este hecho, en 2018, cuando surge el tercer eje.

https://twitter.com/elonmusk/status/1026872652290379776?s=20&t=OKNYnA3GgoqX7bf-Lp085A
Elon Musk ha ejercido desde ese año como el defensor de la libertad de expresión, autoproclamándose “ absolutista de la libertad de expresión”. Ahí puso su objetivo en Twitter y empezó a alabar su potencial y a ‘rajar’ de sus directivos, que impedían que la compañía fuera “la plaza del pueblo de Internet”, donde todo el mundo pudiera decir lo que quisiera. Cuatro años más tarde, Musk ha comprado Twitter por 44.000 millones y está decidido a crear la red social de sus sueños.

"Las consecuencias de esta encuesta -sobre la libertad de expresión en Twitter- serán importantes. Votad con cuidado".
"Las consecuencias de esta encuesta -sobre la libertad de expresión en Twitter- serán importantes. Votad con cuidado".

Los demás dirigentes

Herbert Diess, de Volkswagen, es seguramente el más activo después de Musk, trabajando con maestría y cierta picaresca sus cuentas de LinkedIn, donde comparte logros de su compañía y aparece junto a vehículos populares como el Cupra Formentor, y Twitter, donde no duda en defender sus intereses con sutiles mensajes cargados de intención.

Como ejemplo está los mensajes que ha dedicado al Gobierno español para pedir que se acelere la adjudicación de ayudas del PERTE del Vehículo Eléctrico al Grupo Volkswagen para empezar a electrificar sus fábricas en España y levantar su planta de baterías en Sagunt. “Enhorabuena Pedro Sánchez. Impresionante cómo trabaja España por la electrificación. Nuestra inversión España sería aún más importante que la de Tesla en Berlín”, dijo Diess antes de la convocatoria del Perte. “¡Gracias, Pedro! Estamos encantados de ayudar a electrificar España […] ¡Ahora la velocidad es la clave!”, publicó para motivar al Gobierno a aprobar el proyecto del grupo presentado para optar a las ayudas del Perte.

https://twitter.com/herbert_diess/status/1522195343961640961?s=21&t=Qx9nmQtl_nqV4WJWyaYVmg
En la misma línea se mueve Wayne Griffiths, un “rebelde con causa” que usa LinkedIn principalmente para mostrar los productos de sus marcas, Seat y Cupra, y sus avances, aunque también se ha alineado con el Grupo Volkswagen y Herbert Diess últimamente para presionar al Gobierno. “Tenemos que seguir avanzando Pedro Sánchez para transformar la industria del automóvil en España. Es la oportunidad más grande que ha tenido toda nuestra industria”, añadió el CEO de Seat y Cupra al debate.

Luca de Meo, del Grupo Renault, apuesta por un perfil de LinkedIn 100% prfesional, compartiendo noticias sobre la actividad de sus marcas y publicaciones sobre el sector del automóvil. De Meo también suele compartir mensajes y vídeos de otras personas con reflexiones interesantes sobre temas tan dispares como el Brexit, la posverdad o la guerra. Mary Barra, CEO de General Motors, y Jim Farley, de Ford, usan su Twitter con los mismos objetivos. Farley suele compartir vídeos y mensajes simpáticos de seguidores con la marca.