Ducati y la ventaja de Márquez

El director general de Ducati, Gigi Dall'Igna, permanece confinado en su casa de Schio, a unos 180 kilómetros al norte de Bolonia, donde está el Departamento de Carreras del fabricante italiano. Desde allí ha valorado para Sky Sport lo que supone la crisis del coronavirus para MotoGP y en especial, lo que les afecta a ellos y a sus rivales en el campeonato.

En Ducati no creen que el Mundial vaya a comenzar el 3 de mayo en Jerez, sino que lo hará como mínimo en el mes de junio. Dall'Igna no vería mal la posibilidad de correr a puerta cerrada, sobretodo porque considera que la actual situación de parón favorece a Honda y a su campeón Marc Márquez, después de los problemas -físicos y técnicos- que evidenciaron en la pretemporada.

"Estoy en casa, con mi familia, como imagino todos los italianos. La moral no es altísima, la situación no es fácil, hubiera preferido que todo fuera normal, con el Mundial ya en marcha, pero no podemos hacer otra cosa que aceptarlo", lamenta el jefe de Ducati.

Las fábricas tienen la oportunidad de seguir trabajando en sus motos, antes del sellado de motores y el paquete aerodinámico en la primera carrera. Así que el 'cerebro' de Borgo Panigale sigue pensando en el desarrollo de la Desmosedici GP20. "Trabajo desde casa en lo que puedo. Estamos tratando de solucionar alguna cosa que no fue del todo bien en el último test, aunque la mayor parte de los técnicos no están trabajando. Nos estamos concentrando en las cosas que deberemos dejar congeladas en la primera carrera, básicamente en la aerodinámica, sobre la que podemos todavía hacer algún cambio", explica.

Sobre la posibilidad de comenzar la temporada con carreras sin público, Dall'Igna opina que "en un caso como este se necesita asumir el mal menor y una carrera a puerta cerrada lo sería. Los aficionados podrían ver la carreras desde casa en televisión, no sería lo mismo, el ambiente en el paddock sería extraño y antinatural. Pero estamos en una emergencia, así que bienvenidas las carreras a puerta cerrada".

La FIM solo puede dar valor de campeonato del mundo a la temporada 2020 si se completan un mínimo de 13 carreras, algo que en Dorna ven factible y Dall'Igna, también, aunque con reservas: "La situación se está agravando día a día. Es estúpido hacer cualquier planificación ahora, porque mañana quizá cambien las cosas. Confío que las 13 carreras que se necesitan para tener un campeonato del mundo se puedan hacer.

Dall'Igna imagina qué hubiera sucedido de haberse podido disputar la carrera de MotoGP el pasado 8 de marzo en la prueba inaugural del Mundial y lo ve como una oportunidad perdida para Ducati en un circuito tradicionalmente muy favorable para ellos como Losail: "Tras el último test tenia confianza. En la simulación de carrera con goma usada, Dovizioso y Petrucci, lo hicieron muy bien. Estoy seguro de que Andrea lo hubiera hecho bien en carrera, como en los últimos dos años, cuando ganó en Catar. También Danilo mejoró respecto al test de Sepang. En resumen, me hubiera gustado hacer la carrera y creo que lo hubiéramos hecho muy bien".

"Creo que Márquez se beneficiará de este parón, porque es el que más tenía que recuperarse físicamente. Con estos meses de preparación adicional estará más preparado. La parada también deja espacio para algunos fabricantes que habían tenido problemas en términos de rendimiento y fiabilidad, tendrán tiempo para intervenir. Me estoy refiriendo a Honda, con seguridad, pero también a Aprilia, que tenía algunos problemas de fiabilidad y podrá cubrirse desde este punto de vista", añade Dall'Igna.

En cuanto a la renovación de sus pilotos, el jefe de Ducati señala que "por lo que respecta a nosotros, el mercado está absolutamente parado. A nuestros pilotos le diría que entrenen todo lo posible, que se preparen físicamente, porque cuando comience la temporada no habrá tiempo para parar y mirar alrededor, será un campeonato muy condensado, más que nunca". Y es que mientras Honda ha renovado a Marc Márquez por cuatro años y en Yamaha han cerrado su apuesta por Viñales y Quartararo, en Borgo Panigale ni Dovizioso ni mucho menos Petrucci tienen asegurado su futuro.

También en declaraciones a Sky Sport Italia, Dovi reconoce que cuando acabe la crisis del Covid-19 la temporada estará muy condicionada por un calendario de locura: "Cuando empecemos será como un cohete sin pausa. Y todo dependerá de tu velocidad entonces. Si es buena, en estas carreras consecutivas puedes ganar. Si no es así, puedes entrar en crisis aún más que en circunstancias normales".