El análisis del GP de Catar: La ambición de Alonso

Fernando vuelve al podio siete años después de Hungría'14

Lewis Hamilton no se rinde y aumenta la presión sobre Max Verstappen cuando quedan dos carreras por delante. El hombre del día en el debut del Gran Premio de Catar para la Fórmula 1 fue un excepcional Fernando Alonso, que volvió al podio desde el GP de Hungría del 2014.

1. La ambición de Fernando

Tiene 40 años y, después de dos años alejado de la F1, está viviendo un revival. Ha puntuado en 14 de las 20 carreras y es décimo en la clasificación del Mundial de Pilotos y parte decisiva de que Alpine esté en quinta posición en el de Constructores. Le conozco bien y la ambición, el carácter y la motivación que desprende no me sorprenden lo más mínimo, de la misma forma que ni yo ni nadie puede extrañarse de su clase, competitividad y talento en la pista. Es un fenómeno que solo necesita el coche adecuado para rubricarlo en resultados, como siempre ha demostrado cuando ha tenido un vehículo capaz. Contagia la confianza, el optimismo y las ganas de superarse a sí mismo, siendo el principal aval que tiene Alpine de cara a un 2022 que se presenta como una gran oportunidad para cambiar el orden establecido en la última década. La carrera con la que nos deleitó en Catar resume claramente todas sus capacidades.

2. Una estrategia muy arriesgada

La estrategia ganadora en Losail fue la de dos paradas, pero Fernando Alonso consiguió subir al podio haciendo una sola, alargando al máximo el primer stint con el neumático blando (rojo) que había utilizado en la Q2. La táctica le sirvió al asturiano para volver al podio, que no hacía desde el GP de Hungría del 2014, pero hay que reconocer que fue muy arriesgada y solo el mimo que tuvo con sus gomas, evitando golpes contra los pianos, le permitió acabar la carrera y hacerlo a un ritmo más que aceptable. Valtteri Bottas, por ejemplo, perdió sus opciones de subir al podio cuando se le descompuso el neumático en la vuelta 35 antes de su primer paso por boxes. Al finlandés le pasó lo mismo que a los Williams de Russell y Latifi en los últimos compases de la carrera, cuyas gomas se desintegraron después de quedarse sobre las lonas.

3. Hamilton aprieta al aspirante

Con dos carreras por delante todo está abierto. 8 puntos separan a Verstappen de Hamilton y los pronósticos son inciertos. Los pequeños detalles son a priori los que van a decidir el título, aunque la superioridad de Mercedes sobre Red Bull ha sido manifiesta en las últimas carreras. Hamilton, que es un piloto que no perdona, ha aprovechado la velocidad de su coche para marcar las diferencias, poniendo contra las cuerdas a Max. El holandés se vio perjudicado en Losail por la decisión de penalizarle en la parrilla, que no critico porque lo establece el reglamento pero sí por las formas, ya que no se lo pueden decir cuando está a punto de subirse al monoplaza. Cierto que Verstappen está mostrando una gran madurez, que le permite minimizar los daños, pero de mantenerse la tónica actual poco podrá hacer. Hamilton aprieta y Red Bull tiene que reaccionar.