El análisis del Gran Premio de Gran Bretaña de MotoGP

Fabio Quartararo logró la quinta victoria de la temporada en Silverstone, un triunfo que ha asentado sus opciones para ganar su primer título. Aleix Espargaró le dio su primer podio de la era MotoGP a Aprilia tras quedar tercero detrás de Àlex Rins.

1. Los Espargaró, protagonistas

Carrera de grandes emociones para los hermanos Espargaró, su familia, amigos y fans. Los de Granollers, que ya tienen un dilatado historial en el Mundial, se han convertido en grandes protagonistas del fin de semana. Pol, el pequeño, logró el sábado su primera pole desde que fichó por Honda y tras liderar las primeras vueltas ha terminado en una prometedora quinta plaza. Aleix, el mayor, hizo saltar la banca. Este año había hecho carreras muy interesantes, demostrando que la moto italiana ha dado un paso hacia delante, superando poco a poco los problemas de fiabilidad. Faltaba un resultado y éste llegó en Silverstone. Aleix, que llegó a colocarse primero en lucha con Pol, terminó tercero, el primer podio de la marca de Noale en la clase reina desde que lo hiciera Jeremy McWilliams en el British GP de 2000. Su última vuelta defendiéndose de Jack Miller fue para enmarcar, repleta de carácter, determinación y valentía.

2. Márquez, al filo de la navaja

Márquez está recuperando las sensaciones y su progresión sobre la moto es más que una evidencia. Este fin de semana ha vuelto a ser protagonista, por partida doble. La primera, porque ha estado regularmente delante en todas las sesiones de entrenamientos, liderando incluso el FP1. La segunda, porque ha sumado tres nuevas caídas a su extensa lista de infortunios. En los diez grandes premios que ha disputado desde que regresó ya se ha caído en dieciséis ocasiones, las tres últimas en el British GP. La última en la primera vuelta de la carrera tras un toque con Jorge Martín, mientras que la más pavorosa fue la del viernes a 270 km/h, un incidente del que salió ileso pero que me puso la piel de gallina. A Marc le ha gustado siempre vivir al filo de la navaja, buscando los límites de la moto y de la pista y está claro que ello no ha cambiado tras el calvario que le ha tocado vivir.

3. Viñales y Dovizioso, de actualidad

El nombre de Maverick Viñales sigue de boca en boca. No ha estado en Silverstone, pero su espíritu sí ha estado muy presente en el paddock, donde se anunció que esta misma semana protagonizará un primer test con Aprilia y que si es positivo podría debutar con la marca italiana en el próximo GP de Aragón. La apuesta de Aprilia por Viñales es total y el piloto de Roses espera encontrar entre los de Noale el calor, la confianza y la autoestima que fue perdiendo los últimos tiempos en Yamaha. Dejando de lado los motivos del cambio, partiendo de la base que dos no se pelean si uno no quiere, tengo claro que Maverick se la juega con el paso que ha dado. Y él lo sabe. Su marcha, por otro lado, ha obligado a Yamaha a reestructurar a todo el equipo y este mismo fin de semana en Silverstone han anunciado el inminente fichaje de Andrea Dovizioso, que correrá a partir de la próxima carrera con su equipo satélite y con contrato también para el 2022.