Márquez: "Que estemos en Sachsenring, no significa que vaya a ganar"

Marc Márquez (Honda) llega a su circuito preferido, aquel en el que ha ganado las últimas 10 veces que ha ocurrido (una en 125cc, dos en Moto2 y siete en MotoGP, del 2010 al 2019), Sachsenring, Alemania, y lo hace estrenando un nuevo casco diseñado para la ocasión, un dibujo muy retro y que provocará, sin duda, que miles de aficionados al motociclismo recuerden los cascos de pilotos legendarios de las últimas décadas.

Hemos querido inspirarnos en los diseños de los cascos que lucían los pilotos de los años 70 y 80. La verdad es que estoy enamorado de este diseño y, sí, espero que me de suerte, ha señalado el piloto de Cervera (Lleida), que mostró, de nuevo, su satisfacción por las siete magníficas vueltas que protagonizó en el último Gran Premio de Catalunya (siempre viendo delante de mí a los favoritos), donde acabó cayéndose (prefiero esas siete vueltas a tope, que recordaban al viejo Márquez, que acabar el 12) y, también, por el durísimo test que tuvo, al día siguiente, lunes, en Montmeló donde tanto yo como Honda, como todo mi equipo técnico, liderado por Santi Hernández, avanzamos mucho. Sí, me siento muy feliz de aquel día.

Problemas en Honda

Aquel lunes, sigue explicando MM93, el líder de Honda, cuya fábrica llega a Alemania con su récord negativo de 21 grandes premios sin ganar (la última victoria, cómo no, data de Valencia-2019, a manos de Márquez), se pudo trabajar sin cámaras, sin presión y sin mirar el cronómetro lo que es vital cuando quieres probar muchas cosas y avanzar. Y, no solo eso, desde que reaparecí en Portimao no he tenido un día tranquilo como ese lunes y la verdad es que hicimos muchísimo trabajo juntos y espero que mejoremos a nivel competitivo en un circuito donde siempre, siempre, me ha ido bien.

Bien, no, mejor que mejor. MM93 lleva 10 años ganando en Sachsenring. Que nadie piense que voy a liderar todos los entrenamientos, lograr la pole y ganar el domingo porque eso no va a suceder o creo que no ocurrirá, entre otras cosas porque aunque cada vez me encuentro mejor, pues ya me han quitado los antibióticos que, quieras o no, siempre te debilitan algo, aún no estoy físicamente a todo. Pero, bueno, cada vez estoy mejor y llegamos a un circuito de izquierdas, que son mis curvas.

Arriesgar para probarse

En efecto, Sachsenring, un trazado de 3.371 metros, tiene 13 curvas, 10 a izquierdas y solo 3 a derechas. Es evidente y en eso no voy a engañaros que creo que aquí no tendré limitaciones físicas como tuve en Mugello o Barcelona. Aquí podré apretar, no sé si en cada vuelta, pero sí podré empezar a comprobar cuál es mi progresión y mi real estado de forma, así como el acoplamiento a esta moto que nos está dando problemas a todos los pilotos de Honda.

Márquez, que ya temió que alguien empiece a pensar que va a conseguir su 11 victoria consecutiva en los bosques alemanes, insistió en que que Sachsenring sea uno de mis trazados preferidos, que me vaya bien, que me sienta cómodo, que tenga muchas curvas de izquierdas, que haya ganado siempre no significa que sea el momento de volver a ganar. Creo que es un buen fin de semana, insisto, para medirme, gestionar mucho más y mejor el riesgo y los límites.