Estos son los 25 sistemas de seguridad que te salvarán la vida en la carretera

Los Sistemas de Asistencia a la Conducción Avanzados son cada vez más habituales en los coches nuevos, ya que reducen considerablemente el número de accidentes de tráfico

Los sistemas de asistencia a la conducción ADAS (Advanced Driver Assistance Systems) son cada vez más habituales en los coches nuevos, puesto que contribuyen a reducir el número de accidentes y ofrecen la máxima seguridad al volante. A continuación, te contamos cuáles son los 25 más destacados, según la Dirección General de Tráfico (DGT).

  • Alerta de Tráfico Cruzado: durante la marcha atrás, la visibilidad de los coches que se aproximan es limitada, por lo que este sistema detecta a los vehículos que se aproximan hasta 30 metros de distancia, y emite un aviso sonoro. Además, enciende un aviso en el espejo retrovisor izquierdo o derecho, según el lado por el que se aproxime el vehículo.
  • Alerta de ocupación de plazas traseras: se trata de un innovador sistema de alerta estrenado en el Hyundai Santa Fe, que monitoriza los asientos traseros para detectar pasajeros y alerta al conductor al salir del vehículo. Este sistema es especialmente útil para impedir que se olvide a un niño o a un bebé dormido en el coche, una situación que podría acabar en tragedia con una elevada temperatura exterior.
  • Asistente de aparcamiento automático: este sistema es cada vez más habitual y permite estacionar el vehículo sin que el conductor tenga que mover el volante. Es más, a veces no tiene ni que tocar el freno, ya que el sistema se encarga de todo. El usuario únicamente tiene que encontrar un hueco adecuado y activar la función en el cuadro de mandos.
  • Aparcamiento por control remoto: este sistema permite aparcar el coche a distancia y desde fuera del habitáculo, con el propio mando a distancia del coche o desde un smartphone con una aplicación específica. Audi, BMW o Mercedes-Benz ya lo incluyen en su equipamiento opcional.
  • Asistente de cambio y de mantenimiento de carril: a través de distintos sensores, este sistema vigila la zona posterior del vehículo y su ángulo muerto. A partir de 15 km/h, una señal óptica en el retrovisor exterior correspondiente informa de que un vehículo se aproxima por detrás o está en el ángulo muerto. Este asistente también lee las líneas de la carretera y si el conductor no activa el intermitente, hace vibrar el volante o el asiento y lanza avisos sonoros o luminosos, con tal de impedir que el coche se salga del carril. Asimismo, algunos modelos retoman automáticamente la trayectoria correcta si el conductor ignora los avisos.
  • Asistente de maniobras con remolque: este sistema ayuda a maniobrar marcha atrás cuando se circula arrastrando un remolque. Para ello, emplea el mismo mando con el que se ajustan los retrovisores y señala en la pantalla cuánto se quiere girar y en qué dirección. El conductor únicamente debe accionar el freno y el acelerador, mientras que el asistente calcula qué giros de volante son necesarios para colocar el remolque en el lugar exacto.
  • Asistente de visión nocturna: este revolucionario sistema emplea una cámara térmica que muestra la distribución del calor delante del vehículo; por lo que ofrece la visualización de la calzada, del entorno, de objetos, animales y personas. Algunas marcas como, por ejemplo, Audi marcan en la pantalla en color amarillo los peatones o animales detectados y, en caso de considerarse posible peligro, se señalan en rojo y apareciendo un triángulo de aviso.
  • Aviso de colisión frontal con detección de ciclistas y peatones: este sistema analiza absolutamente todos los objetos en un radio de 150 metros delante del vehiculo y, en caso de que el impacto sea inminente, avisa y prepara los frenos para detener el coche. Además, en muchos casos este sistema cuenta con reconocimiento de peatones o ciclistas.
  • Ayuda de arranque en pendiente y control de descenso en pendiente: el primer sistema frena el vehículo durante aproximadamente dos segundos en pendientes superiores al 3%, para que el conductor pueda pasar tranquilamente del freno al acelerador sin que el coche vaya hacia atrás. El segundo sistema permite bajar por una pendiente deslizante a baja velocidad mantenida y regulable. Este sistema actúa de forma autónoma, aportando seguridad y tranquilidad de que el coche no va a patinar.
  • Cámara de marcha atrás: ya es muy habitual ver este sistema en la mayoría de los coches nuevos, incluso en segmentos modestos. Se trata de una cámara situada en la parte trasera que se activa al engranar la marcha atrás y permite ver posibles obstáculos. Además, los últimos sistemas ofrecen una cámara 360º con una vista panorámica del perímetro del vehículo.
  • Control antivuelco: este sistema reduce automáticamente la velocidad cuando detecta riesgo de vuelco. Cuando el coche se desvía bruscamente para evitar un obstáculo, el sistema aplica presión a los frenos y activa el ESP de manera que se reduce drásticamente la probabilidad de volcar. El control antivuelco se emplea sobre todo en los SUV, puesto que son más altos de lo normal.
  • Control de crucero adaptativo: este sistema funciona gracias a un sensor de radar que detecta la presencia de los vehículos precedentes y mantiene de forma automática una distancia constante con ellos.
  • Control de la presión de los neumáticos: este sistema avisa cuando las ruedas llevan una presión incorrecta. Existen dos tipos de control de la presión de los neumáticos: el activo y el pasivo. El activo cuenta con un sensor en cada rueda y detecta de forma individual la baja presión; mientras que el pasivo recurre a los sensores del ABS y el ESP y es menos preciso.
  • Control gestual: se trata de un sistema que permite activar distintos sistemas en la pantalla del salpicadero con solo mover una mano.
  • Control predictivo del motor: se trata de un modo de marcha adaptado a la topografía de la ruta. A través de la ubicación vía satélite y un mapa de carreteras en 3D, este sistema detecta el trazado de la vía y actúa optimizando con previsión los puntos de cambio y la velocidad regulada por el control de velocidad.
  • Detección de otros vehículos al abrir la puerta: gracias a unos sensores ubicados en los retrovisores, este sistema avisa al conductor cuando detecta que viene un coche por detrás y el sistema reconoce que se va a abrir la puerta.
  • Detección de salida de la calzada: tras detectar que el coche ha sufrido un accidente y se ha salido de la calzada, este sistema activa los sistemas necesarios para reducir al máximo los daños a los ocupantes: tensa los cinturones y activa un sistema de absorción de impactos verticales en los asientos, reduciendo así los daños sobre la columna.
  • Detector de fatiga: este sistema analiza el comportamiento de la conducción mediante varios sensores y advierte al conductor de indicios que apuntan a un comienzo de pérdida de atención. El detector de fatiga aumenta la seguridad especialmente en trayectos largos.
  • Faros antiniebla con iluminación en curva: Este sistema se enciende de forma independiente cuando se gira el volante para dar un mayor control sobre el entorno.
  • Frenado de emergencia postcolisión: este sistema se activa de forma instantánea al sufrir un accidente, evitando empeorar la situación cuando tras un impacto no muy grave el conductor pierde el control del coche por nervios o desvanecimiento.
  • Llamada de urgencia y asistencia localizada: el sistema eCall se pone en marcha en caso de indisposición, accidente o avería mecánica. Al activar el botón SOS, el vehículo contacta telemáticamente con una plataforma de asistencia que, en función del lugar en el que se encuentra el automóvil y la gravedad de los heridos, avisa inmediatamente a los servicios de emergencia. Este sistema es obligatorio en los coches nuevos desde el 31 de marzo de 2018.
  • Proyección en parabrisas de información relevante: este sistema proyecta datos importantes sobre el parabrisas, ayudando a no desviar la vista durante la conducción.
  • Reconocimiento de señales: gracias a una cámara que reconoce las señales de tráfico, este sistema informa en todo momento del límite de velocidad de la vía que recorremos.
  • Regulación dinámica de las luces de carretera: este sistema permite llevar sin problema las luces "largas" o de carretera activadas, puesto que él mismo las cambia a "cortas" si detecta un coche de frente, para evitar deslumbramientos.
  • Sistema proactivo de protección de ocupantes: tras detectar una maniobra de emergencia, este sistema prepara al vehículo y los sistemas de sujeción de los ocupantes para una posible colisión. Asimismo, si detecta aceleraciones laterales elevadas, también cierra las ventanillas y el techo solar, evitando, en caso de colisión lateral, que entren objetos en el habitáculo.
https://neomotor.sport.es/conduccion/que-hacer-en-caso-de-accidente-para-que-no-te-salga-caro.html