Seis recomendaciones para cuidar el coche en invierno

Revisar el estado de la batería, los líquidos y llevar equipado el coche contra el frío evita muchos imprevistos

La llegada del invierno trae lluvias, granizo, nieve y otros fenómenos atmosféricos que hacen que cambiemos distintos aspectos de nuestra rutina y a la vez hacen que nos cuidemos más. Sin embargo, no somos conscientes de que las bajas temperaturas también afectan a nuestro coche y a su mantenimiento, y por lo tanto, no le prestamos los cuidados necesarios para esta época del año. Las averías más comunes provocadas por la falta de cuidado del vehículo son las siguientes: fallos en la batería (230 euros), problemas en el motor (entre 1.000 y 1.500 euros), llevar el líquido refrigerante en mal estado (70 euros), mal funcionamiento de la calefacción (150 euros), rotura de las gomas del parabrisas (36 euros), fallos de otros líquidos como el aceite, el líquido de los frenos o el de dirección (50 euros). Todos estos fallos que suponen un gasto extra se pueden evitar si se realiza un correcto mantenimiento del coche para que esté en perfectas condiciones. [caption id="attachment_10188" align="alignnone" width="1280"] Opel Mokka X[/caption] Autingo, una aplicación móvil que calcula al instante el coste de una avería de un vehículo, expone seis recomendaciones que se deben tener en cuenta durante el invierno para proteger a nuestro vehículo de la época más fría del año.

  • La batería de un coche es la pieza clave para mantener todo lo demás bajo control. Cabe destacar que cuanto más frío haga será mucho más complicado poner en marcha un coche. Por este motivo, es importante revisar el estado de carga de la batería en un taller antes de la llegada del invierno, ya que así sabremos si está preparada para afrontar los duros meses de frío, o si necesita algún ajuste. En el caso de que la batería tenga más de seis años, es recomendable sustituirla, ya que las probabilidades de que produzca más fallos aumentan con las bajas temperaturas y además, se suelen descargar con mayor frecuencia.
  • Revisar todos los sistemas líquidos del vehículo también es muy recomendable, puesto que corren el peligro de congelarse y ralentizar el correcto funcionamiento del coche. Los sistemas líquidos del vehículo son el líquido refrigerante-anticongelante, los aceites, el limpiaparabrisas y el líquido de frenos. Además, es fundamental esperar todos los días a que el motor se caliente, al igual que los líquidos, para que alcancen una temperatura mínima y funcionen correctamente.
  • Revisar las luces, los neumáticos, los frenos, el sistema de calefacción y la luneta trasera térmica. De esta forma, podremos viajar con la máxima seguridad, sin pasar frío y con una buena visibilidad trasera. La revisión de todos estos elementos es muy importante para hacer más confortable cualquier desplazamiento y para mejorar la experiencia del viaje.
  • Hay ciertos objetos que debemos que llevar de forma imprescindible en el coche durante esta época del año. Algunos de ellos son obligatorios (chaleco reflectante, los triángulos de señalización, el juego de luces de repuesto y una rueda de emergencia), mientras que otros se suelen llevar durante todo el año en el vehículo (una linterna, cargador de móvil para situaciones de emergencia, un botiquín, bebida y comida en el caso de realizar un viaje largo). Otros objetos que hay que tener en cuenta si hace mucho frío y nieva son: una manta, guantes, rasqueta para el hielo que se forma en los cristales, pala de campana, cables de arranque, eslinga de arrastre, un cepillo rascador y cadenas.
  • Antes de salir de casa es muy importante revisar el estado de las carreteras y del tráfico existente en el tramo que se va a recorrer, para prevenir la duración del viaje e ir lo más preparados posible.
  • Un buen mantenimiento del vehículo es imprescindible para que no nos falle nunca. Por este motivo, es muy importante acudir al taller y pasar todas las revisiones que marca la normativa vigente.