¿Puedo tener una moto eléctrica sin cargador en el parking?

Probamos el Ray 7.7 para demostrar que se puede ser propietario de un scooter eléctrico sin cargador en el parking.

La electromovilidad ha llegado para quedarse, de eso no cabe duda. La preocupación por el medio ambiente hace que las nuevas generaciones de urbanitas no solo se preocupen por las etiquetas de la DGT, también quieren formar parte de la solución. Sin embargo, el poco nivel adquisitivo, la incertidumbre y la falta de infraestructura son enemigos de la transición eléctrica. En este artículo trataremos de aportar algo de luz sobre una de las dudas más recurrentes: ¿Puedo tener un scooter eléctrico sin cargador?

La emergencia climática y la concienciación de las nuevas generaciones ha sido el caldo de cultivo perfecto para el nacimiento de compañías que diseñan, desarrollan y producen nuevos vehículos cero emisiones. Es el caso de Ray Electric Motors, afincada en Sant Joan Despí (Barcelona) y encargada de la fabricación del modelo Ray 7.7. Hemos elegido este scooter eléctrico por su parecido, en cuanto a prestaciones y conducción, con un modelo de 125 cc o 300 cc. Además, no tiene baterías extraíbles, así que, sí o sí, debes enchufar el scooter a una toma de corriente.

Probamos el Ray 7.7 por Madrid, una ciudad accesible a la moto eléctrica / Foto: Neomotor
Antes, pongámonos en situación. ¿Quién se plantearía un scooter como el Ray 7.7? En mi caso, por ejemplo, me he movido toda la vida con scooter por Barcelona y me encantaría que esos trayectos sirvieran para reducir mi huella de carbono sin renunciar a la libertad y agilidad que me proporciona una moto. Sin embargo, nuestros hogares no parecen estar de nuestra parte.

Según el Eurostat en 2018 casi un 65% de la población española vivía en pisos. Puede que la pandemia modifique ligeramente esos datos pero sigue estando muy lejos de la media europea del 46%. Eso dificulta tener un cargador individual, tipo wallbox, para la carga particular en una plaza individual. De modo que, obliga a depender de la infraestructura pública, que tampoco es boyante. Es el pez que se muerde la cola.

El principal problema de la electrificación es la infraestructura, que está mejorando / Foto: Neomotor
La industria de la moto ha desarrollado diversas alternativas para afrontar esta ausencia de cargadores en las viviendas. Algunos han instalado baterías extraíbles que puedes sacar de la moto y llevar a casa para enchufar en una toma doméstica, incluso con carrito como es el caso de Silence. Es un proceso tedioso, muchas veces pesan demasiado y no tenemos ascensor para llegar del garaje a casa.

Ray 7.7 en cambio, y con la intención de ir un paso más allá en su capacidad, autonomía y eficiencia, ha optado por un modelo de batería fija. Tenemos, por tanto, que encontrar cargadores para enchufar este scooter pero: ¿qué pasa si no tenemos en nuestro parking?

El modelo más tecnológico

El Ray 7.7 puede no ser una belleza pero es el scooter más tecnológico del mercado / Foto: Neomotor
Si hasta ahora eres usuario de un scooter de 125 cc y quieres pasarte a la electromovilidad el Ray 7.7 es una opción que debe estar en tu lista. Se trata de un modelo que, por su potencia y dinamismo, se podría llegar a comparar con una 300 cc sin necesidad de tener ese carnet y poder conducirlo con el de coche (B) tras los tres años de rigor.

Los ideólogos de esta marca son unos auténticos apasionados de Tesla, y se nota. Han recurrido a materiales y dispositivos de vanguardia para ofrecer un scooter de 10,7 kW de potencia, unos 14 CV, con picos de hasta 23 CV. La aceleración es de lo mejor en un vehículo eléctrico, también en este modelo de 290 Nm de par inmediato pero adaptable al modo de conducción elegido: Flow, City y Sport. Ninguno de ellos limita la velocidad punta que alcanzas, pero sí afecta a la curva de potencia. Es decir su entrega y la intromisión de la frenada regenerativa en los modos City y Sport.

Una conducción especial

Conducir un scooter eléctrico supone cambiar algunos hábitos / Foto: Neomotor
En el modo City puedes llegar a circular sin necesidad de apretar ninguna maneta de freno, a lo que te acostumbras muy rápido. El Flow, en cambio, es ideal para la circulación rápida como las M-30 o las Rondas de Barcelona, dado que deja correr la moto como si se tratara de un modelo de combustión. Eso sí, no conseguirás sumar ningún kilómetro de autonomía al marcador.

Una autonomía que se homologa en 150 kilómetros y que, tras una semana de uso, puedo asegurar que se aproxima de manera casi perfecta a lo que concede realmente la Ray 7.7. Eso la sitúa entre las más interesantes para aquellos que viven en el extrarradio o no tienen un cargador en casa, como es mi caso.

¿Cuánto tarda en cargar?

El Ray debe su denominación a la capacidad de su batería: 7,7 kWh / Foto: Neomotor
La batería de 7,7 kWh (de ahí su nombre) puede cargarse en un enchufe doméstico, pero tardará 4 horas y 20 minutos en llegar del 0 al 100%. Opcionalmente, puedes pedir un cargador de Tipo2, la clave del Ray 7.7 y el motivo por el que podrías llegar a comprarla, o alquilarla, sin tener cargador en casa.

Este enchufe te permite conectar el scooter a tomas de corriente alterna de hasta 3,3 Kw. Las ciudades como Barcelona y Madrid están repleta de este tipo de puntos de carga y solo tarda 2 horas y media en conseguir el 0 a 100%. Un proceso que pocas veces deberás completar, dado que irás enchufándola cuando tengas oportunidad.

Es más, la firma no recomienda ese gasto extremo por un tema de salud de la batería, tratando siempre de mantener del 20 al 80%. En ese caso, pocas veces nos veremos obligados a estar más de 2 horas esperando a que se cargue. Tiempo suficiente para aprovechar los recados, comidas, momentos en la oficina y compras varias para ir completando esa carga.

¿Cómo aprovechar la red pública de cargadores?

El Ray 7.7 cuenta con compatibilidad completa con la aplicación, que gestiona la carga.
Para moverte necesitando los cargadores públicos vas a tener que descargar la aplicación Electromaps. Esta app te informa de los cargadores, su capacidad, su mantenimiento y el precio del kW. Desde tu móvil podrás localizar el que más te interese y descargar la aplicación de ese servidor concreto para reservar el cargador, activar la carga al llegar y pagar.

Además, y gracias a la aplicación de Ray, podrás realizar un seguimiento del proceso de carga, programar dicha carga en caso de tener un enchufe en casa, marcar el límite de carga que deseas y gestionar la velocidad de carga. Esto último es interesante en caso de tener más tiempo, dado que puedes alargar la vida útil de la batería.

Y eso no es todo, también puedes establecer un punto habitual, ver tus medias de consumo, estadísticas y mucho más. Pero sin duda, lo más interesante, es el navegador integrado en su pantalla compatible con la aplicación que comentábamos, y que resulta de lo más intuitiva para moverte por la ciudad con flechas y avisador de metros hasta la intersección.

Conclusión: ¿Puedo tener el Ray 7.7?

Sí puedes tener un Ray 7.7 sin tener cargador en casa, si vives en la ciudad adecuada / Foto: Neomotor
Tras una semana con el Ray 7.7, aprovechando las cenas con amigos y las reuniones de trabajo para cargar en estaciones públicas, me atrevería a comprar una unidad sin cargador en mi garaje. Es la mejor conclusión que podríamos dar pero que sirve, únicamente, para aquellos que viven en ciudades con infraestructura suficiente como son Madrid, Barcelona, Valencia o Málaga, entre otras. ¿Mi recomendación? Si estás pensando en adquirir un scooter eléctrico de este estilo: estudia el mapa de Electromaps, los precios y haz cuentas.

Es este último punto es el más complicado de un Ray 7.7 que, con un precio de 7.593 euros, se puede considerar modelo premium. Con la intención de acabar con esa barrera de adquisición, Ray Electric Motors ha puesto en marcha el servicio de financiación, al estilo renting, con una entrada de 1.796,37 € y cuotas mensuales de 99 euros durante 2 o 3 años. La decisión final es de: quedártela, entregarla pagando la última cuota o cambiarla por la siguiente generación.

¿Cómo va el Ray 7.7?

El Ray tiene hasta 3 alturas diferentes y marcha atrás / Foto: Neomotor
Una vez hemos solucionado la duda inicial de la carga, y la posibilidad de moverse con un scooter 100% eléctrico, vamos a probar este Ray 7.7. Lo primero que me gustaría destacar es un par de soluciones que demuestran el trabajo de diseño y desarrollo tras el modelo. Empezaré por el asiento, que puede colocarse en tres alturas distintas de 770 milímetros, 785 y 800 mm. Es decir, seas alto o bajo este scooter encaja contigo y la posición de conducción será bastante cómoda.

Luego está el tema de la marcha atrás que, teniendo en cuenta el peso de las baterías y lo fácil que es revertir el movimiento del motor, nos ayuda a subir y bajar la moto al caballete central. Eso sí, el acompañante o paquete va bastante elevado y sus estriberas se entrometen demasiado en el espacio del conductor, un punto negativo que deberán mejorar para la siguiente generación. Una hornada que, esperemos, mejore el aspecto del diseño frontal en líneas generales. Para gustos colores.

El Ray 7.7 tiene hasta 3 modos de conducción, frenada regenerativa y una buena parte ciclo.
Una fealdad, a mi parecer, que compensa con su espíritu innovador, sostenible y el apartado dinámico. Conducir un scooter eléctrico como el Ray 7.7 es todo un placer. No hay vibraciones, no hay ruidos y el empuje para salir de los semáforos y adelantar es brutal. Todo en su conducción es positivo y accesible para cualquier usuario de un scooter 125 cc térmico. Sus reacciones son casi idénticas, en parte por la elección de llantas de 15 pulgadas delante y 14 pulgdas atrás que conceden estabilidad en vía rápida pero mucha agilidad para circular entre el tráfico urbano.

Eso sí, deberás tener en cuenta algunas diferencias como el tacto del puño del acelerador, que es bastante natural, pero te concede una entrega significativa. Especialmente en el modo Sport. Por suerte, Ray ha montado un buen sistema de frenos con bomba axial con disco de 260 mm delante y 220 atrás, además de la denominada frenada regenerativa de los modos City y Sport. Tiene un mordiente contundente, así que cuidado con la maneta.